Los diabéticos deben elegir cualquier alimento que coman con mucho cuidado, ya que cada elección de alimentos que hacen tiene un impacto profundo en su salud en general. La diabetes afecta a personas de todas las edades, ambos sexos, de todas las clases sociales y procedencias.
Si no se trata, puede causar heridas que se curan lentamente, las infecciones tardan más en curar, además causar ceguera e insuficiencia renal. La dieta es uno de los medios más importantes para controlar la diabetes, y un estilo de vida vegetariano con su énfasis en baja grasa, fibra de alta, y alimentos ricos en nutrientes es muy complementaria. Afecta a más de 30 millones de personas en todo el mundo, esta enfermedad impide que el cuerpo procese adecuadamente los alimentos.
Por lo general, la mayoría de los alimentos que comemos se digieren y se convierten en glucosa, un azúcar que es transportada por la sangre a todas las células del cuerpo y se utiliza para obtener energía. La hormona insulina ayuda a que la glucosa pase a las células. Sin embargo, los diabéticos son incapaces de controlar la cantidad de glucosa en la sangre debido a que el mecanismo que convierte el azúcar en energía no funciona correctamente. La insulina está ausente, presente en cantidades insuficientes o ineficaces. Como resultado, la glucosa se acumula en el torrente sanguíneo y lleva a problemas como la debilidad, incapacidad para concentrarse, pérdida de coordinación y visión borrosa. Si el balance correcto de la ingesta de alimentos y la insulina no se mantiene, un diabético también puede experimentar niveles de azúcar en la sangre que sean demasiado bajos. Si este estado se prolonga durante un período prolongado de tiempo, puede conducir al coma e incluso la muerte.
Aunque incurable, la diabetes puede ser controlada con éxito a través de dieta y ejercicio, medicamentos orales, inyecciones de insulina, o una combinación. En vez de contar calorías, los diabéticos deben calcular su consumo total de carbohidratos por lo que no menos de la mitad de su comida se compone de hidratos de carbono complejos. Muchos vegetarianos diabéticos han descubierto que, como resultado de su dieta sin carne, han tenido que usar las inyecciones de insulina menos, lo que les da una sensación de poder y control sobre su enfermedad.