Las temperaturas más bajas del invierno son grandes aliadas de la buena forma.
Especialistas afirman que el cuerpo aumenta el gasto calórico en hasta 10 por ciento para mantener una temperatura regular. Junto a una dieta balanceada y ejercicios regulares, el frío ayuda a los que desean perder los kilos extras para el próximo verano.
«El cuerpo trabaja más para calentarse y, de esa manera, gasta más calorías. Es importante aprovechar el invierno para adelgazar», afirmó la nutricionista brasileña Luciana Harfenist. «El mejor período para la práctica de ejercicios más intensos y para empezar una buena dieta es el invierno. Es un buen momento para adelgazar, y no desesperarse en verano para perder los kilos que sobran».
Saciedad e hidratación
Según la nutricionista, ingerir algunos alimentos ayudaría aún más el régimen. Café, jengibre, pimientas (que no deben ser consumidos por personas hipertensas o con enfermedades intestinales), además de fibras, desencadenan el gasto calórico.
Las sopas y caldos son importantes pues calientan el cuerpo y mantienen la inmunidad, al igual que ofrecen saciedad. «Una vez que las personas tengan más hambre en el invierno, las sopas pueden ser consumidas antes de otros alimentos, reduciendo el hambre», comentó la especialista. Consume sopas caseras, no artificiales, con vegetales frescos que aportarán nutrientes a tu cuerpo.
Otra ventaja es que esos alimentos ayudan a hidratar el cuerpo, ya que es común que las personas reduzcan la ingestión de líquidos en el invierno.
La experta añade que no es necesario cortar las comidas típicas de la estación, como el chocolate caliente, pero algunos consejos pueden ser útiles para dietas, como usar leche descremada y endulzar cafés y bebidas con edulcorantes.